Te amo, tal vez de una manera
particular, amo cada una de tus actitudes, amo tu esfuerzo y tu lucha, tu deseo
de trascendencia, tu libertad y tu inocencia, amo tu locura y tu coraje, amo tu
sonrisa, sencilla y pura, todo eso que amo me ayuda a entenderte, a tratar de
apoyarte.
A veces me siento inútil,
despojado de la seguridad que tenía, tal vez por el inicio accidentado de lo
nuestro, por el comienzo pedregoso, pero aún sigo firme en la tormenta, sigo
pensando en que nuestro futuro es grande, sigo viendo en ti la mujer noble cuyo
único deseo es amar con pasión y ser amada de la misma manera, veo el anhelo de
una vida juntos, luchando cada día por construir la felicidad
Creo que no me ves con fuerza,
a veces siento que tambaleo, aunque las cosas no han sido fáciles, he tenido días
complicados, pasados por nubarrones, pero los he sorteado con gracia bajo el
amparo del altísimo, que me brindo ángeles de soporte, uno de ellos eres tú,
que en los momentos en que me vi quebrantado tomaste fuerza y convertiste el
dolor en fe, paciencia y oración, fuiste el apoyo en mi caída, las alas en mi
abismo.
Al final creo que el amor se
trata de eso, de esfuerzo, de lucha, lágrimas y agonía, pero tiene una dulce
recompensa, el regocijo de un corazón que late en espera de ver esa sonrisa
iluminar de nuevo mis días.
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